Enseguida nos pusimos de acuerdo y empezamos a darle vueltas a que podíamos hacer. Tras una primera reunión con Pep y los Brosmind brothers, sentamos las bases de las piezas. Dos cómics y algo que los enlazara. Con esas premisas estuvimos valorando muchas opciones hasta dar con las fundas al más puro estilo doble vinilo de los ochenta. A partir de ahí empezamos con los materiales. Les propusimos jugar con papel espejo + tinta blanca especial(es muy cubriente y se puede utilizar en una maquina offset convencional) + cuatricomia.
Ahora ya con el reloj en contra los brosmind sólo tuvieron un par de semanas para acabar los dos comics y la funda.Nosotros por nuestro lado tuvimos la precaución de hacer varios prototipos de fundas para ver cual encajaba mejor. El papel utilizado no era el más dúctil del mercado como para troquelarlo y hacer manipulación sobre él pero había que conseguirlo porque sabíamos que el resultado valdría la pena.
Con documentos finales entregados empezamos la impresión siempre con Brosmind en las puestas en máquina. Hay que decir que una constante en todos los grandes diseñadores con los que hemos trabajado es que tienen una capaciad de trabajo ilimitada y que se implican hasta en el más pequeño de los detalles. Ahí nosotros ya sabemos cuando estamos delante de talento o un mero trabajador del diseño.La verdad que aunque pasamos dificultades por la complejidad de la pieza, trabajar con Brosmind fue la mejor recompensa que tuvimos al colaborar con el Festival Offf.
Eso y que Pep y Hector nos hicieran llegar sus felicitaciones por nuestro trabajo
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