2 de des. 2010

varniz o no varniz

esa es la cuestión.
Le ponemos varniz a unas tarjetas que van con un fondo negro y que en la cara son básicamente blancas.
Pues con toda logica pensamos que sí, pero luego también -la verdad és que no nos gusta demasiado poner varnices-  nos asaltó la idea de que con varniz nos cargábamos un poco la textura del papel.

 Así que con algo de incosciencia imprimimos sin varniz. Haciendo pilas pequeñas, utilizando tintas de secado rápido, maculando todas las tarjetas antes de cortar...y con algo de suerte, al final las tarjetas quedaron impecables.Aunque... en las imprentas los finales felices cuestan mucho que ser den.
Cuando la negreta lo recibió estuvieron encantados hasta que empezaron a tocarlas. No manchaban (eso ya lo habíamos comprobado) pero si se tocaba el fondo negro dejaba una marca (de la grasa de las manos. hay quien tiene más o menos y muchas veces no se nota).
Así que las recogimos maldiciendo nuestra chulería y recordandonos a nosotros mismos que si hay varnices va a ser por algo...
Una vez las tarjetas en casa y después de darle muchas vueltas al tema conseguimos "varnizarlas" con spray una a una...la imprudencia tiene un precio.